Sam SernaProducción: Alias Grace
Creador: Mary Harron
Año: 2017
Plataforma: Netflix
En cinco líneas esta serie:
Está basada en una obra de Margaret Atwood
Tiene sutiles tintes de terror psicológico
Su base está construida sobre un discurso feminista
Domina una sensación de vacío y lentitud
Permite múltiples interpretaciones
Ha sido un año brillante para la escritora y activista canadiense Margaret Atwood, autora de una poderosa joya literaria que sin duda debería ser considerada como una obra contemporánea imprescindible por sus tintes distópicos y feministas: Handmaid´s Tale. La plataforma Hulu, a pesar de tratarse de una con un nacimiento no muy lejano, logró una adaptación homónima espectacular de la novela –no por nada tiene un 95% de calificación en Rotten Tomatoes– que le valió cinco Emmys en la última premiación, incluyendo mejor serie de drama y mejor actriz en serie dramática en manos de su protagonista, Elisabeth Moss. Netflix, como es usual, no quiso quedarse fuera de la conversación y decidió producir su propia adaptación de otra obra de Atwood, Alias Grace. Pero con un contrincante tan aclamado, ¿podrá esta ganarse la mirada del público como otro tributo bien ejecutado a la escritora? ¿o está destinada a vivir tras la sombra de Handmaid´s Tale?
La miniserie sigue la historia de Grace Marks (Sara Gadon), una joven acusada de un doble homicidio en Canadá a mediados del siglo XIX , donde la mente femenina es prácticamente un enigma indescifrable para el resto de la población y la mujer es tratada como un medio más para un fin. Conforme avanza la historia, la culpabilidad y cordura de Grace se tornan más difusas, haciéndote dudar sobre su inocencia o supuesta culpabilidad. Indudablemente la narración juega un papel esencial para la efectividad de la historia, pues su evidente intención de dejar algo a cargo de la imaginación del espectador con cierres sin atar y detalles a considerar resulta efectivo para la premisa, donde domina la intriga y confusión.
Si bien Alias Grace no resulta tan fresca y retadora como Handsmaid´s Tale, el discurso feminista está presente con un personaje principal crítico, elocuente, astuto y rebelde. A mi parecer el gran acierto de la producción se encuentra en la complejidad de Grace, en como se percibe a sí misma y en la forma en la que confronta situaciones desafiantes; todo como una imagen en contraposición de la mujer típica en ese contexto histórico y social. La dirección de arte es impecable, ofreciendo una ambientación tanto certera como atractiva a la vista, contribuyendo a ofrecer una fotografía notable.
En contraposición la historia resulta insípida por momentos, lenta con sensaciones de vacío o una excesiva extensión considerando a dónde se busca llegar. En retrospectiva, algunos capítulos resultan ornamentales, en los cuales domina el vacío y es precisamente Grace lo que nos mantiene enganchados, dándole consistencia a los cuarenta minutos de tu tiempo. Definitivamente no es adictiva, ni se posiciona con la fuerza suficiente para derrocar a la producción de Hulu, pero indudablemente tiene algo que decir aunque esté destinada a ser opacada por un gigante.