PRODUCCIÓN: EL PORVENIR (L’AVENIR)
DIRECCIÓN: MIA HASEN-LØVE
AÑO: 2016
PLATAFORMA: CARTELERA
EN 5 LÍNEAS ESTA PELÍCULA
Es un drama reflexivo
Isabelle Huppert muestra una gran interpretación
Tiene un ritmo sutil y cadencioso
Es una cinta sobre la madurez
Se aleja del melodrama
El Porvenir ya se había presentado el año pasado en salas mexicanas, esto durante el 20 Tour de Cine Francés y siendo una de las películas más destacadas de aquella selección. Se trata de la más reciente cinta de la joven Mia Hasen-Love, quien ya cuenta con una solida filmografía. En esta cinta, la experimentada Isabelle Huppert (quien hace poco se llevó grandes elogios por su actuación en Elle de Paul Verhoeven) interpreta a Nathalie, una profesora de filosofía en una universidad de París. La primera parte de la historia nos plantea el contexto y las bases de lo que, precisamente, está por venir.
Nathalie, además de profesora, también se dedica a escribir libros de texto sobre filosofía, lleva veinticinco años casada con Heinz (también profesor universitario) con quien tiene dos hijos adultos, mantiene una buena amistad intelectual con uno de sus destacados exalumnos y se encuentra al pendiente de su manipuladora y posesiva madre. De pronto, Nathalie ve como todo a su alrededor se empieza a desmoronar en un determinado lapso de tiempo: la editorial de sus libros de texto pierde interés en ella, su esposo le confiesa que le es infiel, su exalumno quien antes la admiraba se distancia un poco y su madre muere dejándole a una anciana y gorda gata. A pesar de la capacidad intelectual de Nathalie, esta se ve en dificultades para afrontar todo esto, “pensé que me ibas a amar para siempre” le dice a su esposo cuando él le confiesa su infidelidad.
A fin de cuentas, la cinta nunca se convierte en un melodrama, mas bien lo que Hasen-Love quiere retratar es el paso del tiempo. En el inicio, vemos a Nathalie tener complicaciones para entrar a la propia escuela donde da clases, debido a una manifestación que mantienen algunos alumnos por cuestiones relacionadas con la jubilación, “todavía no se gradúan y ya están pensando en su retiro” dice uno de los alumnos que no está de a cuerdo con la protesta de sus compañeros. Y es que los días de juventud del personaje de Huppert la hacen conocer los dos lados de la moneda, sin embargo, ahora afronta una nueva etapa en su vida.
Hasen-Love maneja la narración con un cadencioso y sutil ritmo sin miedo a continuos cortes elípticos haciendo de la película un reflexivo drama. Son frecuentes las referencias filosóficas, aunque lejos de ser meramente decorativas, aportan al contexto general. Es curioso que durante una de sus clases, Nathalie debate sobre la libertad con sus alumnos y secuencias después se da cuenta de su verdadera libertad. Tras todo lo sucedido, por primera vez en años tiene todo el tiempo para ella misma. Si la vieja y gorda gata aún tiene instinto para cazar, ¿por qué ella no tendrá la fuerza de seguir adelante?.
De esta manera, para la última parte de la película ciertos paralelismos acerca del tiempo salen a flote: su madre muere pero su nieta nace, su editorial decide ya no publicar sus libros de texto pero algunos de sus alumnos la invitan a apadrinar un blog y se divorcia de su esposo pero encuentra su libertad individual justamente en la madurez de su vida. De cualquier manera, la clave es afrontar las situaciones con la familiaridad y sensatez que Isabelle Huppert le imprime de gran manera a su personaje.