Producción: Fargo
Creador: Noah Hawley
Año: 2014
Plataforma: Netflix

 

En cinco líneas esta serie:

Es un drama violento con tintes de humor negro

Es una adaptación de la película de Joel & Ethan Coen

Es una serie antológica

Combina un estilo excéntrico con una visión enigmática

Viene de más a menos con el paso del tiempo

 

   

 

This is a true story. The events depicted took place in Minnesota in 2006/1979/2010. At the request of the survivors, the names have been changed. Out of respect for the dead, the rest has been told exactly as it occurred.

Cuando se hizo oficial en 2012 la llegada de una adaptación para TV del clásico de cine negro Fargo (1996), en forma de miniserie, como fiel admirador de los hermanos Coen, lo primero que sentí fue mala espina, y mis emociones salieron de control al confirmar que la participación de Joel & Ethan estaría limitada a la producción ejecutiva y que la mente maestra detrás del proyecto era Noah Hawley, un sujeto que hasta entonces solo era conocido por producir y escribir para Bones… el miedo estaba justificado.

Al día de hoy, Fargo cuenta con tres temporadas, un cambio de formato de miniserie a serie antológica y un bien merecido reconocimiento, pues lo que comenzó con desconfianza se convirtió con el paso de los episodios en sincera admiración por el pedazo de adaptación que se ha mandado Hawley. El creador no solo ha sabido expandir los límites narrativos de la obra original, sino que ha revitalizado su tono lúgubremente cómico, interpretando con mérito la estética e inquietudes existenciales que han consolidado la carrera de la introvertida pareja de hermanos directores, hasta encontrar una voz propia que por momentos, sobrepasa al material original.

La acción se presenta en tres periodos de tiempo, siempre en los límites de Minnesota, Dakota del Sur y Dakota del Norte; terreno gélido, implacable y que absorbe a sus pobladores en una atmósfera de enclaustramiento, sazonada por la idiosincracia regional. Las tres historias son independientes, siendo sus personajes o elementos físicos los que pueden llegar a servir como puentes que unen de forma sutil a los distintos relatos.

Es temáticamente donde encontramos una íntima conexión entre temporadas, las cuales fielmente comunican una visión coeniana del universo, en la cual dos fuerzas opuestas de moralidad difusa chocan con resultados inevitablemente trágicos, arrastrando dentro del torbellino a individuos decentes, sacudidos por el caos, pero que encuentran la forma de sobreponerse. Esta lucha por encontrar un sentido moral dentro de un universo inmoral es el leitmotiv de Fargo, que gusta de invitar a sus personajes (y audiencia) a confrontar el silencio caprichoso que mueve los hilos de sus destinos.

A continuación un breve repaso de las tres temporadas:

Temporada  1

2006. La monotonía en el pueblo de Bemidji, Minnesota es interrumpida por la llegada al pueblo de Lorne Malvo (Billy Bob Thornton), un personaje siniestro de aura tan maligna como magnética, y cuya demoniaca influencia alcanza a varios locales y atrae a nuevas figuras peligrosas a la comunidad, absorbiendo en su trayecto al pusilánime vendedor de seguros Lester Nygaard (Martin Freeman), quien se verá involucrado directamente en una serie de homicidios, que lo lanza a una espiral de engaños y atrocidades con tal de encubrir su culpabilidad. En el camino de ambos aparecerá  Molly Solverson (Allison Tolman), comisaria del pueblo a cargo de la investigación de los crímenes. Ésta es, sin duda, la mejor temporada de la serie y uno de los picos más altos dentro de la narrativa televisiva en la última década.

Temporada 2

1979. Los esposos Blumquist (Jesse Plemons y Kirsten Dunst) de Luverne, Minnesota, se involucran accidentalmente dentro de una disputa violenta entre los Gerhart, una familia criminal de Fargo, Dakota del Norte, y una organización mafiosa de Kansas City con deseos de expandirse. En medio del caos se encuentra Lou Solverson (Patrick Wilson), policía estatal y padre de Molly (Temporada 1), quien es abrumado por la violencia que se desata a su alrededor, mientras intenta dar con el culpable de un homicidio múltiple en una cafetería rural. A pesar de no contar con el carisma de la primera entrega (Billy Bob Thornton es irremplazable), esta temporada se las arregla para mantener una narrativa consistente, incrementando el pulso dramático hacia los últimos episodios, con presencias sobrenaturales incluidas.

Temporada 3

2010. Es turno de observar a los hermanos Emmit y Ray Stussy, ambos interpretados por Ewan McGregor, quienes mantienen un pleito de años, que escala hasta cobrar dos víctimas fatales. Entra en acción la oficial Gloria Burgle (Carrie Coon), a cargo de la investigación de las muertes. Simultáneamente, una empresa misteriosa liderada por V. M. Varga (David Thewlis), se entromete agresivamente en los negocios de Emmit sin que él sea capaz de oponerse. El patrón narrativo y conceptual no solo se mantiene, sino que se intensifica, lo cual a estas alturas le resta frescura y brillantez a la propuesta, especialmente porque esta temporada es un poco indulgente con la idea de la ambigüedad resolutiva como motor universal, táctica que no se percibe como un acto consiente de parte de los escritores hasta el capítulo final, aún capaz de justificar su estrategia integral, pero dejando a más de un espectador confundido en el camino.

En resumen, Fargo es sinónimo de calidad, aunque también es cierto que ha venido de más a menos con el paso de las temporadas, pero siempre con las ideas claras, un estilo inconfundible y actuaciones memorables. La valentía y astucia de Noah Hawley al tomar un clásico de los Coen y ser capaz expandir su mitología, aportando nuevos y ricos matices a una historia complicada de abordar, son suficiente motivo para ponerse el abrigo, sentarse y disfrutar del enrarecido espectáculo. You betcha.

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