Producción: Capital Retour
Directores: Léo Bizeul
Año: 2019
Plataforma: FICUNAM10
En 5 líneas este largometraje:
Es una pieza híbrida entre ficción, documental y videoarte
Funciona como un autorretrato de la autora
Nos sumerge en el imaginario visual de la directora
Genera una conversación sobre los performances de género
Es una reafirmación de la identidad trans
La identidad es flexible, fluida, deconstruible y maleable. El género se reafirma todos los días en la ropa que usamos, la manera que actuamos, la música que escuchamos, cómo nos relacionamos con los demás. El performance de género nos permite cuestionar cómo ejecutamos nuestro género y las distintas implicancias que eso tiene en una sociedad occidental que no se ha adaptado a la diversidad identitaria que existe.
La directora y artista trans, Léo Bizeul, presenta su primer largometraje, Capital Retour, una película híbrida en la que se presenta a ella misma como protagonista dentro de su cotidiano, en cuadros plásticos y en conversación con distintos personajes que enmarcan su día a día. La pieza funciona como un viaje por los distintos caminos de la identidad transgénero e intersexual de la creadora y de las distintas dificultades y posibilidades de la subversión del género heteronormado.
«Estoy consciente de que me mantendré transgénero para siempre» es una de las frases que marca la película, una aseveración que la protagonista hace frente a una webcam. Ella toma la cámara y se filma así misma, construyendo su propia imagen y apropiándose de todo lo que significa construir su identidad. Por otro lado, la artista deja rastros de cuestionamientos en torno a la vida social de una mujer transgénero: las dificultades laborales, los procesos médicos y estéticos, los estigmas sociales que implican para una persona trans.
La película entreteje los géneros, moviéndose entre el documental y el videoarte, con lo que la directora logra insertar su imaginario en las imágenes del cotidiano. Sus redes sociales y su webcam se convierten en las herramientas que consolidan la plasticidad de su imagen y su género. (Para explorar más esta propuesta visual, recomiendo mucho revisar el Instagram de la directora.)
Las personas transgénero han existido siempre, desde sociedades prehistóricas en todos lugares del mundo. La identidad nunca se ha dejado de cuestionar y reafirmar, mas es en el rechazo donde esta ejecución encuentra las trabas. Bizeul nos invita a sumergirnos en pequeños espacios cotidianos mezclados con la imaginación y su hacer artístico. Ella crea su propio mundo estético donde ella encuentra su identidad. Ser transgénero, finalmente, puede performarse de distintas maneras, tanto fuera como dentro de los clichés, y no queda en las personas cisgénero el definir ni limitar la ejecución de esa identidad. El género se puede expresar de cualquier manera, es la sociedad la cual lo vuelve marginal.
Pd: Si les interesó esta propuesta, pueden checar el programa de radio Amigues, donde encontrarán entrevistas a DJs mexicanas trans como Neurokill, Guapis y Feral platicando sobre ser trans, la vida laboral y la identidad a través de sus proyectos musicales.
Puedes conseguir boletos aquí.