Samir RiveraProducción: Flint Town
Creador: Zackary Canepari, Drea Cooper, Jessica Dimmock
Año: 2018
Plataforma: Netflix
En 5 líneas esta serie:
Es del tipo documental
Cuenta con una edición firme y entretenida
Usa varios recursos documentales para presentar el conflicto
Intenta mantener un enfoque neutro y sin adornos
Puede sentirse alejada y lenta en algunos momentos
Las series documentales exclusivas parecen funcionarle bien a Netflix. La relevancia que se adjudico Making a Murderer (2015) puso en el mapa la línea que podía llevar este formato en la plataforma, y la oferta sigue creciendo en temas y alcance. Ahora se encuentra disponible un trabajo que presenta un resumen de dos años de seguimiento al cuerpo de policía de la ciudad de Flint, en el estado de Michigan; en un acercamiento a un lugar desamparado en el norte de los Estados Unidos y su lucha por salir de la lista de las ciudades más pobres y violentas del país. Como curiosidad, esta es la ciudad natal de Michael Moore, quien ya había expuesto la situación del lugar en sus documentales.
A manera de conducto, este trabajo toma al departamento de policía local y su relación con la ciudadanía para mostrar la crisis económica alrededor del sitio, profundizando en el factor humano detrás de la labor policial. La serie no es totalmente sobre el crimen y su combate, y tampoco sobre las causas. Pero sí se debate entre lo que debería representar la policía y lo que realmente es, se ocupa de la realidad social desde la procuración de justicia y retoma el pasado de Flint, que fue una ciudad de esplendor en el epicentro de la industria automotriz americana, pero que las recesiones económicas mermaron hasta la degradación actual. La narración enfatiza la disparidad social y parece que es ahí donde este documental tiene su mayor eco. Pone en duda si los problemas sociales son mera consecuencia económica o parten de una compleja crisis moral estadounidense.
Con una buena edición, este trabajo expone las diferencias raciales, culturales e ideológicas de una dependencia muchas veces temida y alejada de sus valores; deja que cada oficial de policía hable de su trabajo y acude al lugar de los hechos cámara en mano (por momentos parece un episodio de COPS) sin caer en el sensacionalismo. También habla con los ciudadanos que padecen el suplicio de ser minoría y el acoso a sus libertades. El periodo de rodaje abarco las ultimas elecciones presidenciales y lo aprovecha para mostrar la polarización de la sociedad. El protagonismo de la ciudad es elocuente al reflejar una fallida organización de las políticas públicas, llegando a generar momentos en pantalla que ridiculizan la realidad de la que se habla aquí.
La temática de Flint Town puede no ser la mas llamativa para quienes no vivimos en aquella sociedad, pero se ocupa bien de plantear una situación y dejar que uno la concluya sin abrumarse. Creo que merece una aproximación más amplia, pues nos enseña parte de la crisis que ha llevado a la nación más poderosa del mundo a una dolorosa debacle llamada Donald Trump.