Producción: Sausage Party (La fiesta de las salchichas)
Director: Conrad Vernon, Greg Tiernan
Año: 2016
Plataforma: Cartelera

 

En 5 líneas esta película:

Es una sátira a las películas de Disney/Pixar

Tiene un buen reparto

Es comedia para adultos

Está llena de clichés

Puede ser ofensiva

 

  

 

Es conocido el trabajo del stoner club compuesto por Seth Rogen, James Franco, Jonah Hill y compañía. Buenos Vecinos, Ligeramente Embarazada, Superbad o Éste es el Fin son algunas de las cintas que nos han dado estos comediantes. Ahora junto a Conrad Vernon y Greg Tiernan, responsables de historias animadas totalmente infantiles como Shrek 2 o Madagascar 3, nos traen una de las cintas más maniáticas del año llamada La Fiesta de las Salchichas.

En la historia de este particular filme somos partícipes de la odisea de Frank, una salchicha que vive en un supermercado llamado Shopwell, cuyo sueño es ser llevado al “más allá” por los dioses (los consumidores) para poder estar junto a Brenda –o más bien dentro de–, un panecillo para hot dog con quien mantiene una relación sentimental. Durante la víspera del día de la independencia norteamericana nuestros héroes casi cumplen su cometido hasta que por accidente salen del empaque, perdiéndose en la vastedad del supermercado. La banda de embutidos deben regresar a su sección y entrar en otro paquete antes de perder su frescor, no sin antes enfrentarse a una serie de desventuras en el camino.

La sátira a las clásicas y canónicas historias animadas de Disney/Pixar se siente necesaria ante una generación que ha crecido con estas cintas y que aún regresa a las salas para apreciar “lo nuevo” de la dupla. Hay que recordar que quienes vieron Toy Story por allá de 1996 cuando tenían, por ejemplo, cinco años, hoy rondan los 25. Francamente pareciera que Disney repite la misma historia una y otra vez: un objeto común humanizado “vive” en su zona de confort de la cual sale súbitamente para enfrentarse al mundo real, y cuyo objetivo es regresar a su lugar no sin antes haber aprendido una valiosa lección de vida. Si revisas bien esa filmografía, la fórmula no tiene fallas, ya que es del gusto de chicos y grandes. Pues bien, el caso de las salchichas no ha sido pensado para el público en general, ya que su alto contenido sexual y sus chistes políticamente incorrectos sobre los estereotipos norteamericanos la hacen un filme estrictamente para adultos. Pensemos que el hecho de que parte del público Disney ya supera los 20 debería suponer que éstas historias evolucionaron orgánicamente hacia una dirección más madura en cierto sentido, sin embargo el apelo a a nostalgia y el síndrome de Peter Pan no permite que cintas como ésta existan en la tierra de Mickey Mouse.

Lo anterior no tiene nada de malo, pero es refrescante saber que Rogen y compañía si piensen en el “que pasaría sí…” respecto a situaciones humorísticas más cercanas a un sector de la población mayor de edad. En resumen la cinta está llena de clichés y soluciones obvias llevadas hasta el absurdo, sustentadas en la comedia sin censura del grupo. Una cinta para ver sin ofenderse, aunque seguramente su objetivo más claro sea el de mostrar que las historias tan inocentes a las que estamos acostumbrados pueden no serlo tanto si son vistas desde otra perspectiva.

 

 

 

 

 

 

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