Producción: Los Débiles
Director: Raúl Rico, Eduardo Giralt Brun
Año: 2017
Plataforma: FICUNAM
En cinco líneas esta película:
Es de drama algo surrealista
Es una mirada fresca a un tema visitado
No tiene actores profesionales
Tiene un agradable enfoque regional
Pues sumarse al hartazgo que hay en el tema
Victor es un joven que emprende un bizarro viaje lleno de personajes excéntricos para encontrar al niño de trece años que supuestamente asesinó a sus dos perros. En la búsqueda de su venganza se retrata el culto a la violencia de nuestro país con un humor particular y lo más interesante, sin hacer uso de armas o incluir escenas demasiado gráficas. Sin embargo, ella siempre está ahí, latente, como personaje principal y eje sobre el cuál orbita la película.
Los directores buscaron hacer de la cinta una vitrina a la vida cotidiana sinaloense, exagerando los personajes como una forma de crítica y a su vez enriquecer la trama al solo incluir personajes originarios de Sinaloa y sin ninguna preparación escénica. Su personaje principal, Victor (Jose Luis Lizárraga), labra las tierras de un rancho en medio de la nada. El principal objetivo del director mexicano fue representar su región con una mirada fresca, veraz y crítica sin convertir su trabajo en una oda amarillista a la violencia.
La película fue estrenada en la Berlinale del 2017 en su segundo día, como parte de la sección FORUM, donde fue bien recibida por la crítica. La sensación de un ambiente surreal, de un mundo distópico marcado por la violencia, es lo que hace del filme un relato alternativo e intrigante de la realidad nacional. Sus directores lograron retratar la agresividad con una distintiva sutilidad e incluso describen su película como un perro salvaje. Es importante mencionar que la producción fue financiada mediante fondeo con una cantidad casi nula, de la cual valieron hasta el último centavo, reafirmando que esta nueva ola de cineastas mexicanos lo que carece en recursos le sobra en pasión. La escena fílmica de nuestro país por fin está comenzando a ser apreciada como merece, dónde se demuestra la inquietud de nuestra generación por la crítica, reflexión y la necesidad de catarsis.
Raúl Rico y Eduardo Giralt manifestaron que su inspiración proviene tanto de los tabloides de crímenes locales como de artistas sinaloenses admirables y cuya obra gira entorno a la violencia; tales como la respetada artista conceptual Teresa Margolles, el provocador fotoperiodista Fernando Brito y la literatura de Elmer Mendoza. Los Débiles es producto de un arduo trabajo de campo que condujo a los directores a parar en cantinas, ranchos y comunidades rurales para construir sus personajes y escenas, mientras recuperaban la fuerte tradición oral de Sinaloa e intentaban incrustarla en los protagonistas.
Los Débiles es una atípica puesta en escena de la realidad mexicana; aquella manchada de sangre, infancias corrompidas, masculinidad tóxica y violencia. Sin embargo, México no se define por esto: la grandeza de nuestro país se esconde en la gente, en la fertilidad de nuestras mentes y en la forma tan peculiar de interpretar nuestra realidad.
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