Cosa rara nuestras recomendaciones de este mes. Por una parte tenemos un par de cinco-estrellas, una de ellas un clásico de clásicos de la ciencia ficción por la cual estamos casi reivindicando a Netflix por todos sus errores, y la otra un nuevo clásico para el cinéfilo que ya califica el año 2000 como nostalgia. Las tres restantes son películas llevaderas que si bien no son nuestras favoritas, sí son perfectas para pasar un buen rato ligero. Es que luego nos dicen que nos ponemos bien europeos.
Que lo disfruten.
Blade Runner
Director: Ridley Scott
Año: 1982
En 5 líneas esta película:
Es un noir de ciencia ficción
Tiene una ambientación icónica
Deja muchos cabos sueltos
Es cerebral
Es ciencia ficción pura y dura
Quizá algunos no sepan, pero gran parte de la ciencia ficción que se consume hoy, sobretodo la vertiente cyberpunk, tiene su origen en Blade Runner. El clásico de Ridley Scott, el cual tiene la virtud de ser un tremendo representante de dos géneros cinematográficos –noir además de ciencia ficción– vino a cambiar para siempre el look del género en la pantalla. Antes de esta película la ciencia ficción se vivía tal vez más como Star Trek o bien cualquier derivado de la serie B. Fue Ridley Scott y su opera magna el que la dotó de negro y neón, además de abrir el caudal de la imaginación a incontables referencias, homenajes y vástagos, ya sea en anime, televisión o cine. La película como tal es ciencia ficción pura dura, en el sentido de que su mayor alcance lo tiene en las ideas que promueve y en la reflexión que ello nos deje. Por su puesto que hay algo de acción, para que la gente no se aburra. Pero sin duda el cómo vemos a la inteligencia artificial hoy en día en la cultura popular tiene una parada forzosa en su historia en esta gran película.
¿Por qué debo verla? Si tengo ganas de un clásico y una película cerebral. (Play)
Capitan Fantástico
Director: Matt Ross
Año: 2016
En 5 líneas esta película:
Es de drama familiar
Está muy bien actuada
Tiene momentos de comedia
Es un poco fantasiosa donde no debería serlo
Deja dudas respecto a su mensaje
Capitán Fantástico fue uno de las películas independientes más queridas del 2016. Y con toda razón, es una de esas películas preparadas para hacernos llorar, con personajes tiernos en situaciones tiernas, a los cuales el guion los pone en peligro de sufrir y a nosotros de preocuparnos por ellos. Pero más allá del convencionalismo, Capitán Fantástico tiene un gran elenco que le aporta materia gris a lo que estamos viendo, con buenos resultados y un redondeo del producto final que nos brinda una película perfecta para una tarde de domingo, en la cual no hay que esforzarse mucho para pasarla bien.
¿Por qué debo verla? Si tengo ganas de un drama ligero bien actuado. (Play)
Elizabeth la Edad de Oro
Director: Shekhar Kapur
Año: 2007
En 5 líneas esta película:
Es un drama histórico
Es una secuela
Tiene un gran elenco
Buenos elementos de producción
A ratos se siente lenta
Algo que es cierto es que existen (buenas) películas de las que nos olvidamos completamente hasta que alguien nos las recuerda (como nosotros a ustedes en este preciso párrafo) y nos entra una confusión muy rara. ¿Elizabeth (Kapur, 1998) tiene secuela? ¿Y también la protagoniza Cate Blanchett? ¿Y con ella Geoffrey Rush, Clive Owen y Eddie Redmayne? Pues sí, esta película del 2007, también dirigida por Shekhar Kapur, continúa con la historia de la Reina Virgen, Elizabeth I de Inglaterra, interpretada por Blanchett, en una de tantas actuaciones que le ha dado una nominación al Oscar. Si bien a esta segunda parte le falta un poco el lustro de la primera, esa que catapultó a Cate a la fama internacional, no por eso es menos interesante y sí merece ser revisitada ahora que Netflix la agregó a su catálogo.
¿Por qué debo verla? Si tengo ganas de un buen biopic… o si me gusta Cate Blanchett. (Play)
Ghost in the Shell (Vigilante del futuro)
Director: Rupert Sanders
Año: 2017
En 5 líneas esta película:
Es la adaptación a la pantalla grande de la famosa saga
Es una reinterpretación del anime
Tiene las mismas bases compartidas con el resto de la saga
Es buena acción
Puede resultar limitada para los fans
Y si justo hablábamos de la influencia de Blade Runner en la cultura popular, pues no hay un descendiente más directo y con más alcance que la saga de Ghost in the Shell. Originalmente publicada en 1989, creación de Shirou Masamune, hoy en día la franquicia se expande a lo largo de una mutiplicidad de mangas, animes, versiones para la televisión y ahora finalmente una película de acción. Cuando finalmente se anunció la película, la controversia no se hizo esperar, Scarlett Johansson era otra actriz caucásica más contratada para interpretar a un personaje asiático. Y al parecer el mal inicio se tradujo en malas críticas y estas en un fracaso comercial. Los fans más acérrimos se negaron a aceptar al patito feo entre la extensa familia de producciones de la saga que tanto amamos. Ahora bien, la película tiene muchos de los mismos elementos que originalmente el anime readapto del manga, es decir, Ghost in the Shell en sus múltiples versiones pareciera ser un cúmulo de ideas y conceptos que luego se vuelven a juntar para armar una historia. La película es tan solo una iteración más de este ejercicio y de paso sea dicho, uno entretenido y dotado de acción.
¿Por qué debo verla? Si tengo ganas de una película de ciencia ficción con mucha acción. (Play)
Requiem por un Sueño
Director: Darren Aronofsky
Año: 2000
En 5 líneas esta película:
Es de drama
Ofrece un gran impacto visual
Tiene un desenlace poco tradicional
Tiene excelentes actuaciones
Es demoledora
Hoy en día Darren Aronofsky está convertido en un reconocido director de Hollywood; uno que se ha pastoreado por los Oscar y aunque a título personal no se ha llevado la grande, una de sus películas sí le valió la preciada estatuilla a Natalie Portman (y otra revivió la carrera de Mickey Rourke). Con una trayectoria similar a la de Wes Anderson (el Wes Anderson de los friquis), Aronofsky tuvo sus inicios en el mundo del cine independiente, en donde se volvió casi un director de culto debido a su opera prima Pi (1998). Requiem por un Sueño lo vino a consolidar como un director que venía a romper con el cine tradicional. La película es un viaje del tipo montaña rusa que eventualmente termina en, bueno, requiem. La película es una joya visual, sobretodo por el uso de close-ups extremos y seriados, algunos de ellos llegarían a ser parodiados inclusive en Los Simpsons (señal inequívoca del éxito). Sin duda un nuevo clásico y uno bastante poderoso que no es para cinéfilos sensibles.
¿Por qué debo verla? Si tengo ganas de un drama poderoso y algo complicado. (Play)