Yo

Producción: Yo

Director: Matías Meyer

Año: 2015

Plataforma: Cartelera

En 5 líneas esta película:

Habla sobre personas aisladas.

Es un poco surrealista.

Desarrolla un buen personaje.

Se confunde en su desenlace.

No es para todos.

Yo es una película de drama que trata sobre el aislamiento y soledad de las personas con discapacidades. La historia esta contada a través de su personaje principal llamado Yo (si, de ahí el titulo de la película), quien es un poco lento en sus facultades mentales pero es funcional. La historia esta basada en el cuento del mismo nombre escrito por Jean-Marie Le Clezio. Yo vive con su madre y ambos atiende un restaurante a lado de la carretera. El trabajo de Yo se limita a matar pollos (con una aspiradora) cada vez que alguien ordena dicho manjar en el restaurante. Yo es una persona de buen corazón pero atormentado por sus limitaciones, que en ocasiones han derivado en agresividad inclusive en contra de su propia madre, lo que puede resultar un problema ya que Yo pesa alrededor de los 110 kilos. Un día el novio de la madre de Yo compra una maquina que puede matar y desplumar pollos, por lo que la intervención de Yo no es necesaria en el restaurante. Ahí nuestro anti-héroe se emplea en otro lado e inclusive hace amiguitos. Con un estilo de vida más autosuficiente Yo empieza a vivir una vida más normal e inclusive empieza a irse de parranda con sus amigos al antro local, pero Yo seguirá siendo Yo.

La película es el tercer largometraje del director Matías Meyer, quien continuó con su tradición de utilizar actores no profesionales. La historia es naturalmente bizarra, Yo es un personaje muy complejo: limitado de sus facultades mentales, con un físico imponente, agresividad que intimida, y con alguna frustración sexual que nos tiene con el Jesús en la boca; y su entorno no es algo a lo que estamos acostumbrados: es sucio, caótico, y adverso. Pero Yo demuestra tener un gran corazón, y tener los mismo deseos e ilusiones que cualquier otra persona. La película coquetea con tonos surrealistas, el mundo que rodea a Yo es extraño y es mas extraño cuando se ve a través de los ojos del protagonista. Yo tiene sueños que pueden o no ser premoniciones, y eventualmente gente acude con el a pedirle favores. Hay saltos en la narrativa en donde se nos va diciendo que va suceder en el futuro, como si estuviéramos viendo los sueños de Yo. La trama tarda en arrancar y por buena parte de la película sentimos que estamos ahí solo para ser testigos de la existencia de Yo. Después nos damos cuenta para que fuimos citados, aunque al final todo parece una mala broma del destino, sin pregunta dramática o agencia por parte del protagonista.

Matías Meyer hace un gran trabajo en fotografiar este mundo extraño para nosotros, y en construir a un personaje que termina por ganarse al público, pero al final pareciera que la película se confunde solita con sus propios recursos narrativos. La clave esta en las premoniciones de Yo, pero fuera del rio desbordado ni Yo, ni nosotros (tal vez ustedes si) la vemos venir. Una muerte debería alarmar mas a Yo que un rio desbordado. Yo es una buena película que nos presenta un personaje diferente en un mundo diferente, y lo hace para darnos el mensaje que todos somos personas, sin importar a quien ignoremos.