El suspenso se construye a partir de la fascinación que produce el desentrañar la naturaleza aberrante. Más que una historia de horror criminal es una sobre el misterio del mal en el ser humano.
A la serie se le puede acusar de sobrevalorada o de genialidad; podemos estar hartos de ella o no cansarnos nunca; pero sólo hay una verdad absoluta: la están rompiendo.